«El Emocionario le ofrece una oportunidad integradora
al ser humano, desde su más tierna infancia, porque le ayuda a conocer
sus emociones y a dialogar sobre sus sentimientos.
De este modo, podrá gestionarlos adecuadamente y, así, sentir
su vida con todo su potencial, sin detrimento de ninguna de sus
capacidades. El diccionario de emociones es un apoyo pedagógico elemental». Rosa Collado Carrascosa (psicóloga y psicoterapeuta).
CONSEJOS DE USO (Guía en PDF) | ||||||||
Como
el Emocionario lo utilizan personas de distintas edades (niños y
adultos), hemos segmentado la información por franjas para que te sea
aún más útil.
|
||||||||
|
||||||||
Para personas de 3 a 6 años | ||||||||
Para
niños pequeños, recomendamos que se comience sacando provecho a las
ilustraciones de las emociones más sencillas (vergüenza, ternura, odio,
aburrimiento, felicidad). El niño y el adulto pueden conversar sobre qué
les ha sucedido a los personajes de las ilustraciones y sobre cómo se
pueden sentir y por qué. También puede resultar adecuado explicar
situaciones que se hayan vivido en las que esté implicada la emoción de
que se trate en cada caso. A continuación, se puede leer el texto; por
lo que sabemos de otras experiencias, los niños disfrutan cuando se les
leen los textos y, de esta manera, se van familiarizando poco a poco con
el vocabulario. Además, así adultos y niños se acostumbran a que las
emociones pueden ser un tema de conversación natural entre ellos y se va
aumentando la confianza y la intimidad entre ellos.
En otros momentos, cuando los niños experimentan una emoción determinada, que todavía no conocen, se puede leer la definición en el “Emocionario”. Así, los niños van identificando lo que oyen con lo que sienten. Esto tiene un efecto tranquilizador y normalizador: por un lado, aprenden que lo que sienten tiene un nombre; por otra parte, saben que otras personas sienten lo mismo. |
||||||||
Para personas de 7 a 9 años | ||||||||
Que
los adultos y los niños compartan experiencias vinculadas a
determinadas emociones contribuirá a establecer vínculos más fuertes y a
que los miembros de la familia se conozcan mejor unos a otros. A
algunos niños les asombra comprobar que sus padres también sienten miedo
o inseguridad. Esto ayudará, además, a fortalecer la empatía de los niños y su capacidad para ponerse en el lugar del otro.
|
||||||||
Para personas de 10 a 12 años | ||||||||
A
estas edades, los niños van experimentando cambios físicos y psíquicos
impredecibles, sorprendentes e inesperados. El “Emocionario” puede ser
un gran aliado en la intimidad como lectura rutinaria: con la lectura
diaria, se crea un tiempo y un espacio íntimos en los que reflexionar
sobre las propias emociones y acostumbrarse a procesar lo vivido sin
dejar que se enquiste. Además, aconsejamos ayudarse del “Diario de la
Gratitud” para ir anotando esos sentimientos y emociones que, especialmente en esta etapa, suelen parecer desbordantes e ingobernables.
|
||||||||
Para otros lectores | ||||||||
Por
lo general, utilizamos sólo cuatro o cinco términos para expresar
nuestras emociones. Esa manera de sintetizar nuestro vocabulario
emocional influirá en los niños de nuestro entorno, ya que el ejemplo es
su principal fuente de información. Si nosotros nos refiriésemos al
naranja, amarillo y rojo con el término naranja, los niños se
expresarían de la misma manera.
Conscientes de esto, muchos docentes y otras personas con niños a su cargo, utilizan el “Emocionario” para refrescar los matices entre unas emociones y otras y así conseguir que los niños adquieran un vocabulario que dé cuenta de su riqueza emocional. |
||||||||
EJEMPLOS REALES DE USO | ||||||||
Muchas personas nos maravillan con los usos prácticos que le dan en casa y en el colegio. ¡Gracias a todas ellas!
|